¿Activo fijo? Si te dedicas a la renta de impresoras, entonces los equipos que tienes en renta en las instalaciones de tus clientes son tus herramientas más importantes para cumplir con tus operaciones. Es decir, son tu principal activo fijo.

En cualquier negocio, los activos fijos juegan un papel fundamental, pues son la base operativa y su mantenimiento adecuado puede marcar la diferencia entre el éxito y los costos innecesarios. Ya que si por ejemplo, una flota de impresoras que no recibe mantenimiento regular. Las fallas técnicas inesperadas pueden generar interrupciones y pérdida de productividad, además de aumentar los gastos en reparaciones no planificadas. 

Es aquí donde el cuidado de los activos fijos se vuelve crucial para garantizar un flujo de trabajo continuo y eficiente en tu negocio.

¿Qué es un activo fijo y por qué cuidarlo?

Un activo fijo es todo aquel bien tangible que tu empresa posee y que es esencial para tus operaciones a largo plazo, es decir, las impresoras que rentas a tus clientes. A diferencia de los activos circulantes, que son más líquidos, o los activos diferidos, que se transforman en gastos con el tiempo; los activos fijos, como impresoras y copiadoras, tienen una vida útil más prolongada. 

El reto es garantizar que su funcionalidad se mantenga a lo largo del tiempo, y aquí es dónde el cuidado y la prevención son esenciales.

Ya que la depreciación de un activo fijo es inevitable, pero la manera en que gestionas su mantenimiento puede retrasar significativamente este proceso. Es por eso que implementar un plan de mantenimiento preventivo y correctivo puede asegurar que tus impresoras sigan funcionando como el primer día y no comprometer la calidad de tus servicios con tus clientes.

Recomendaciones para el cuidado de tus activos fijos

Si aún no implementas estrategias particulares para alargar la vida útil de los activos fijos de la empresa, estas recomendaciones son para ti:

• Mantenimiento preventivo regular: Establecer un calendario de mantenimiento preventivo para cada impresora te ayudará a identificar problemas menores antes de que se conviertan en grandes inconvenientes, optimizando la vida útil del equipo y evitando interrupciones inesperadas.
• Capacitación del usuario final: A menudo, los problemas de funcionamiento se deben al mal uso del equipo. Por eso lo ideal es que capacites a tus clientes sobre las mejores prácticas de uso de las impresoras para evitar sobrecargas, daños por mal manejo o el uso de consumibles no recomendados.
• Monitoreo de desempeño: Utilizar un sistema que te permita monitorear el desempeño de cada impresora te ayudará a detectar patrones de uso que puedan ser perjudiciales. Esta información es vital para ajustar las rutinas de mantenimiento y evitar problemas a futuro.
• Control de calidad de consumibles: Asegúrate de que los toners, tintas y piezas de repuesto utilizados sean de alta calidad. El uso de productos de baja calidad puede causar daños irreversibles en las impresoras, lo que afectará el rendimiento y generará gastos innecesarios.

El valor de los activos fijos de la empresa se deprecia año tras año, pero el ritmo de esta depreciación puede variar según el tipo de activo. En el caso de las impresoras, su vida útil puede extenderse considerablemente con el mantenimiento adecuado, permitiéndote amortizar estos equipos de forma más rentable y eficiente.

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Además, nuestra plataforma te ofrece un control integral sobre la depreciación de un activo fijo, brindándote una visión clara de su valor y vida útil a lo largo del tiempo. Con estas funcionalidades, no solo aseguras el buen funcionamiento de tus equipos, sino que también optimizas tus procesos y evitas costos innecesarios.

Implementar buenas prácticas de cuidado para tus activos fijos no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también se refleja en la satisfacción de tus clientes y los ingresos de tu negocio.  ¡Y con SANTI, tienes todo lo que necesitas para lograrlo!

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